LA ECLOSIÓN DEL ERREKA

Hoy se publica el reportaje del Erreka en el Diario de Noticias, con el título " La eclosión del Erreka". Aconsejamos leerlo en la edición impresa, donde aparece la foto de grupo que nos sacaron ayer, pero de todos modos, os adelantamos la mayor parte del texto. Gracias a toda la gente que se acercó al Polideportivo para sacar la foto y al Diario de Noticias por el interés mostrado.

El Erreka de Doneztebe recoge en este final de 2008 los frutos del trabajo realizado durante decadas. El pasado día 2 Txomin Mindegia, uno de sus entrenadores, recibió de manos del Gobierno de Navarra la Medalla de Plata al Mérito Deportivo por su dedicación al club durante los últimos 25 años. Y un día después, el doneztebarra Ibai Meoki debutaba con el Portland ante el Almería, al tiempo que su amigo Niko Mindegia hacía su mejor partido con los albiazules, siendo además máximo goleador del equipo ese día. 48 horas paradigmáticas del gran momento que atraviesa la cantera del Erreka -que además de a Meoki tiene a Iñaki Indabere en el TID San Antonio-, y que llenaron de orgullo a todo pueblo.

Tras la recogida de la Medalla a Txomin Mindegia, varias decenas de personas vinculadas al Erreka se acercaron al día siguiente al Pabellón Universitario para ver el Portland- Almería. Sabían que ese día también podía haber premio para el Erreka. En el 26 de la primera mitad, con Mindegia momentaneamente en el banquillos, Villaldea dio entrada a Ibai Meoki. Fueron tan solo unos minutos que sirvieron como toma de contacto con la élite del balonmano. Sin embargo, el premio gordo estaba aún por llegar.

Corría el minuto 47 cuando el técnico introdujo varios cambios en el equipo. El asturiano mandó al banquillo a Vugrinec y Kjelling, para dar entrada a Hernández y Meoki. Con Mindegia en la pista, por primera vez en la temporada coincidían dos navarros en la cancha, y ambos de Doneztebe. En la grada se oyó un murmullo y en la cancha a los dos doneztebarras se les escapa una sonrisa. "Cuando vi que entraba empezamos los dos a partirnos de risa, yo creo que fue una escena, además de bonita, bastante graciosa porque también oíamos los ánimos de amigos del pueblo en la grada", recuerda Niko Mindegia.

Para su padre, Txomin, fue algo más: "Fue muy emocionante porque ver a los dos ahí, en primera línea, te trae recuerdos de cuando los entrenabas y eran aún unos críos. Entonces piensas, 'joder que esto es el Portland ya'. Ver a dos productos tuyos, que son amigos de siempre y se conocen a la perfección, jugando en la elite es increíble". Niko Mindegia, asentado esta temporada en el Portland, terminó el partido como máximo goleador del equipo, confirmando que es una alternativa solvente en el centro de la defensa. Meoki, por su parte, no se amilanó -se atrevió con alguna cinta incluso- y aportó solidez en defensa y frescura en ataque.


LARGO RECORRIDO Sin embargo, pese a este momento de euforia, todo el entorno del Erreka es consciente de que sus ex jugadores tendrán que emplearse a fondo para que esta imagen vuelva a repetirse más a menudo. Y es que Ibai Meoki es hoy por hoy jugador del TID San Antonio -filial del Portland- y todavía tiene un largo recorrido hasta hacerse un hueco en el primer equipo antoniano.

"Ibai tiene muchas posibilidades y tanto debutar con el primer equipo como jugar con la selección española junior suponen un impulso muy grande. Igual no está aún para jugar en Asobal, le vendría bien pasar por División de Honor B, pero yo creo que tiene grandes condiciones", subraya Txomin Mindegia.

En el TID San Antonio Meoki comparte vestuario con otro producto made in Erreka , Iñaki Indabere, un pivote natural de Legasa que, pese a que ve "muy lejos" llegar al Portland, según Txomin Mindegia, "si consigue continuidad, le respetan las lesiones y coge confianza puede dar la sorpresa".

Mientras esta generación del 88 lucha en Pamplona por hacerse un hueco en la élite, desde Doneztebe los contemplan con orgullo y con el convencimiento de que su ejemplo y el galardón conseguido por el Erreka ayudará a los padres de la zona a ver que no todo el deporte es fútbol.