En el postre, tuvimos la oportunidad de ver una proyección con imagenes de lo que es el Erreka en la actualidad y lo que ha sido en los últimos. Una proyección que gustó mucho, de hecho no se movió ni alma en los 20 minutos que duró la misma. De lo mejor del día, sin ninguna duda.
Posteriormente se tributó un sencillo pero merecido homenaje a toda la primera plantilla de Erreka, que tanto nos ha hecho disfrutar ésta temporada. Txomin llamó uno por uno a todos los jugadores, se le entregó un medalla y finalmente Marizku recogió la copa que nos acredita como sub-campeones de la temporada 2008-09.
En ese preciso momento llegaron a Doneztebe Gorka Bidegain y su compañero oriotarra. De ésta gesta trataremos más adelante con una exhaustiva crónica que nos están preparando los dos protagonistas. Se les invitó a subir al escenario y se llevaron una grandísima ovación. No era para menos.
Y no nos podemos olvidar que Sanba y Tomás Sanz recogieron de las manos de nuestro presidente un banderín para que lo lleven al punto más alto de Europa: el Elbrus. Seguro que lo consiguen.
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