LOS ARBITRAJES DE HOY o LA CRÓNICA DE UN ESPERPENTO

No vamos a entrar a valorar los continuos y desquiciantes errores de apreciación de los árbitros en la tarde de hoy. Dejando los fallos aparte, que los ha habido hasta hartar, vamos a centrarnos en la actitud fuera de lugar de los colegiados. Los fallos se entienden y se comprenden. Lo que hemos visto hoy, no. Podríamos citar varios hechos y jugadas, pero para muestra, dos jugadas clarificadoras:

- Partido del Erreka A: minuto 27 de la segunda parte con empate en el marcador. Ataca el Itxako. El entrenador del Erreka pide pasivo... y ante el asombro de propios y extraños, para el encuentro y saca la roja a Dani. Lo dicho, ROJA POR PEDIR PASIVO y jugamos con uno menos los minutos decisivos.

- Partido del Erreka B: jugada en la primera parte. Contrataque del Oberena y gol. Uno de los colegiados, encima de la jugada y sin ningún estorbándole no señala absolutamente nada. El otro, desde la otra esquina de campo acude corriendo y saca roja el jugador del Erreka que estaba defendiendo la jugada. Ver para creer: el que está pegado a la jugada no ve ni siquiera dos minutos. El otro desde el otro lado, saca una roja que sólo ve él. Incluso el jugador de Oberena afectado reconoce que la sanción es totalmente exagerada.

En el primer partido 2 rojas ( las dos para el Erreka) y alrededor de 20 exclusiones entre los dos equipos. En el segundo 4 rojas ( las cuatro para el Erreka)  y 21 exclusiones.

Llevamos años en ésto, hemos visto casi de todo, pero lo de hoy ha sido triste...muy triste. Y repetimos, no por los fallos de los colegiados, que son entendibles y forman parte del juego. Pero sí por una actitud que entendemos que ha sido de todo menos respetuosa con el Erreka. Además, nos parece totalmente desproporcionado que tengamos que desalojar nuestro Pabellón para entregar las actas, ya que la afición tuvo una actuación absolutamente normal durante toda la tarde. No debían de tener la conciencia muy tranquila.

Con ésto no queremos quitar ni un ápice de mérito a las victorias del Itxako y Oberena respectivamente, que han demostrado ser grandes equipos y tener una impecable deportividad.